Buscaban la modernización de su imagen corporativa porque no se había modificado desde la fundación de la compañía. Y su responsable consideraba que debía darse un paso adelante y actualizar la marca y darle una dimensión a la altura de los proyectos y objetivos actuales y futuros de la empresa.
Su encargo fue diseñar dos propuestas: una que siguiera el espíritu de la marca antigua y otra propuesta totalmente libre, dentro de nuestro criterio creativo. Finalmente, decidieron apostar por la opción más rompedora con su anterior imagen, donde predominaba el verde, por una donde predominaban los azules. Es cierto que a nivel competencia existen muchas empresas del sector que se identifican con estos colores, pero son las más grandes y punteras en Baleares. Así que el objetivo era equipararnos con ellas y fue a través del color.
El punto más destacado es la tipografía seleccionada para el logo. Es la fuente Praxos IO, que hemos modificado para ajustar la legibilidad y también para tener el nombre formando un conjunto único, de forma que todas las letras conectaran entre sí.
Los otros dos elementos que conforman la marca son el tagline, donde hemos ido a la raíz del tipo de proyectos que puede ofrecer Telma, enumerándolos directamente. Y también el isotipo, nos refiere a un mundo conectado, tanto con las telecomunicaciones como con la electricidad.
Como hemos dicho antes, a nivel color optamos por los azules, siempre asociados a la profesionalidad y la tecnología. En el caso de Telma, hemos optado por combinar dos tonos de azul a través de un degradado que nos aporta una transición amable entre los dos colores.
Además, el efecto del degradado nos aporta un elemento adicional, que es la opción de utilizarlo como fondo en muchas aplicaciones, ofreciendo una riqueza y matices que un color plano no nos daría.
En resumen, pensamos que hemos logrado una nueva marca que ahora está en consonancia con el momento actual de la empresa y también que mira hacia el futuro.





